Debido a la crisis sanitaria, social y económica que se está viviendo, el consumo ha cambiado. Las personas ya no compran presencialmente, cayendo el mercado en este sentido notoriamente. Las compras online han sido la única forma económica de sobrevivir a la pandemia.
Amalia Cabezón, compradora habitual en el comercio mencionó que: “Hoy en día, lo pienso mucho más antes de comprar un producto, sobre todo aquellos que no son tan necesarios, por ejemplo la otra vez quería comprarme unas mascarillas y lo pensé harto antes de hacerlo. Antes con mis amigas estábamos en una tienda y no la pensaba, iba y compraba las mascarillas”.
Este cambio en el comportamiento de los consumidores ha provocado un efecto que a hecho que la economía caiga en un recesión nunca antes vista. “El consumo normalmente crece en Chile un 2,5% – 3% en promedio anual, este año, tuvimos una caída del consumo entre el 5% y el 8%”, informó Cristian Echeverría, economista de la Universidad del Desarrollo (UDD).
Misma opinión tiene Manuel Melero presidente de la Cámara Nacional de Comercio, “esta crisis en el comercio ha sido tremenda nunca antes vista en la historia en Chile, ya que la caída en las ventas viene arrastrándose desde el estallido social del 18 de octubre, lo que se tradujo en que las caídas en las ventas en noviembre fueran del orden del 24% a 27%, en diciembre hubo un leve repunte, pero el verano fue muy flojo y ya en marzo con la pandemia la caída fue de un 20% en las ventas, en abril y mayo subió a un 50% incluso en algunos rubros ha llegado al 80%
¿Cómo es el consumo hoy en día?
Respecto a las modalidades de venta en el comercio, se ha producido una fuerte mutación del sector a las ventas online, antes de la crisis social solo un 5% del total de las ventas del comercio en el país se realizaban de manera online, hoy en día es de un 15%. De hecho, las ventas por medio de internet tuvieron un crecimiento de un 300% y esto ha generado los problemas logísticos que han debido enfrentar estas empresas, ya que es tal la cantidad de la demanda de las compras online que las empresas se han visto sobrepasadas para cumplir con los plazos de entrega de los productos.
“En cuanto a los productos que más se venden hoy en día, son tecnología, línea blanca y artículos deportivos y los más afectados han sido vestuario y calzado. A modo general, las multi-tiendas son las más afectadas, pero el comercio pequeño de barrio, a mi juicio, ha sido el menos perjudicado”, informó Melero.
¿Qué están haciendo las empresas?
Ante la situación crítica del comercio en nuestro país, Cristián Echeverría afirmó que la forma para que las empresas se mantengan activas es por medio de la digitalización, como los servicios virtuales, telefónicos y remotos. Asimismo, señaló que: “Ha disminuido todo lo que tiene que ver con la demanda en restaurantes, hoteles, turismos, transporte, servicios personales”.
Un ejemplo de lo anterior, ocurre en la cafetería Tavelli donde desarrollaron dos marcas independientes para su venta online, con la finalidad de incrementar la oferta al público, una de ellas es “Salad Avenue”, para la venta de ensaladas y la otra “Pannetteria” dedicada a ofrecer distintos tipos de pan. “Aprovechando nuestra capacidad ociosa, creamos dos marcas nuevas que no se relacionan con Tavelli, pero utilizamos los mismos ingredientes y productos para darle más salida al delivery”, afirmó Jesús Selman, Gerente General. Además, señaló que: “Anteriormente las ventas online de Tavelli representaban un 5%, hoy en día representan el 100%, por lo que la venta online de la empresa creció un 200%”.
Por su parte, la señora Lilia Sarmiento, quien posee un almacén en la comuna de San Miguel quien ha tenido que reinventar su negocio, “tuve que empezar también a ofrecer servicios a domicilio, entonces ya con eso, logré recuperar un 40% de todo lo perdido al inicio de la pandemia, aún así no estoy ganando dinero. Realmente estamos sosteniéndonos con otros negocios, pero es básicamente para pasar esta catástrofe”, relató Sarmiento.
La perspectiva de los clientes
Las personas durante esta época han bajado su consumo, puesto que, como dice Cristian Echeverría, han entrado en modo ‘supervivencia’, no obstante, siguen comprando de forma online tanto productos de primera necesidad, como otros que ayudan a su comodidad, y otros productos que son nacidos del deseo de un objeto innecesario.
Al hablar con clientes recurrentes, nos dimos cuenta que el mayor conflicto que tienen al comprar, reside en el costo y plazo de los envíos de sus productos, y a la incertidumbre de si tendrán dinero próximamente. Por esta misma razón muchas veces dudan antes de comprar un producto, se cuestionan si lo necesitan.
Al respecto, Amalia Cabezón afirmó que: “Ahora tengo la mentalidad de ahorrar en mis gastos, evito mucho mis compras impulsivas como los chocolates, antes tenía ganas de comer chocolates y agarraba el auto. Hoy trato de restringirme al igual que ingredientes para cocinar antes compraba mucho más ingredientes de cocina ahora no tanto. Además al comprar online hay un costo por envío entonces si este es muy alto prefiero no comprar el producto”.
Así mismo, Alicia Herrera relató que: “ Uno de los cambios en mis hábitos de consumo, fue respecto a la comida al no poder salir a comer con mis amigos, comencé a comprar utensilios de cocina para cocinar mi comida sobretodo comida asiática que me encanta”.
Pros vs contras del consumo online
En cuanto a los pro y contra del consumo en cuarentena, Alicia Herrera contó que: “Los pros son para mí evitar hacer filas para comprar presencialmente y que el producto te llegue directo a la casa, pero los contras son que a veces eliges el producto por Internet, haces todo el proceso de compra y en la última etapa te aparece el producto como agotado, lo que te hacen perder todo ese tiempo. Además, me ha pasado que algunas tiendas no te avisan que tu producto fue entregado, por lo que recién te enteras cuando te avisa el conserje que algo llegó pero no sabes tampoco que es”.
Por su parte, Antonia de la Maza afirmó que: “Siento que por un lado hay menos autocontrol, en el sentido que es más fácil comprar, llegar, pagar y esperar a que llegue, pero otro lado también es más penca, porque es mejor el ir a comprar, ir a la tienda, ir al mall, el pasearte, el ver opciones. En cambio, siento que el comprar online, delimita mucho en ese sentido, en ver variedad, el ver el producto y todo eso”.
En este sentido Ninoska Alarcón, nos afirmó que ya no compra ropa en internet, puesto que no sabe si le va a quedar bien y las tiendas complican mucho el cambio de producto en caso de que la talla sea equivocada.
Otro tema importante es que tiendas como Jumbo y Linio, solo aceptan tarjeta de crédito, lo cual es poco apto para personas que no pueden acceder a una. Ninoska Alarcón afirmó que “en estas circunstancias no me arriesgaría a usarla, porque primero que nada estoy cesante y segundo, el futuro es muy incierto. Esto, limita harto porque piden que compres por internet y no todos pueden acceder a una tarjeta de crédito”.
